Todo mundo habla del hecho de que las máquinas están aprendiendo muchas cosas. Han estado aprendiendo tanto que además de simplificarnos la vida. Nos han superado en muchas tareas que requieren concentración e inteligencia lógica. Esto ha llevado a mucha gente a pensar en que las máquinas pueden llegar a remplazarnos o a conquistarnos. Sin embargo, se nos ha olvidado que ellas pueden aprender muchas cosas. Pero son incapaces de comprender lo que están imitando.
Las máquinas no pueden “pensar”
Cada vez que una compañía dice que está saliendo con una nueva característica de inteligencia artificial. Generalmente significa que la compañía está utilizando el aprendizaje automático para construir una red neuronal. Este “aprendizaje automático” es una técnica que le permite a una máquina “aprender” cómo realizar un mejor desempeño en una tarea específica.
El aprendizaje automático es una tecnología fantástica con muchos usos poderosos. Pero no se trata de inteligencia artificial de propósito general. Comprender las limitaciones del aprendizaje automático nos ayuda a comprender por qué nuestra tecnología de IA actual es tan limitada.
Ficción vs realidad
La “inteligencia artificial” de las películas de ciencia ficción es un cerebro computarizado o robótico que piensa en las cosas y las entiende como lo hacen los humanos. Dicha inteligencia artificial sería más bien una inteligencia general artificial (AGI). Esto significa que puede pensar en múltiples cosas diferentes y aplicar esa inteligencia a múltiples dominios diferentes. Es decir, una máquina capaz de experimentar una conciencia humana.
Es un poco decepcionante pero esa tecnología aún no existe, es más, no estamos ni cerca de tenerla. Una entidad informática como Siri, Alexa o Cortana no entiende y piensa como los humanos. De hecho, no entiende las cosas en absoluto. Las inteligencias artificiales que tenemos están entrenadas para hacer una tarea específica muy bien. Asumiendo que los humanos pueden proporcionar los datos para ayudarlos a aprender. Aprenden a hacer algo pero todavía no lo entienden.
Fuente: How to geek