Diariamente cometemos errores de seguridad

Diariamente hacemos uso del servicio de Internet. Ya sea para desempeñar el trabajo, para diversión o para buscar información. Muchos servicios se encuentran allí, por lo tanto, la información que le brindemos también se alojará en su propio espacio virtual.

Tal situación provoca que los datos nunca estén completamente seguros contra hackers, virus u otras cosas desagradables.

Sin embargo, para disminuir este riesgo, se deben dejar de lado ciertas prácticas que, comúnmente, realiza la gente. Esos hábitos, tontas en su mayoría, deben de evitarse en medida de lo posible.

A continuación se presenta una lista con los errores más habituales en cuanto a seguridad se refiere.

  • No bloquear la pantalla del teléfono móvil

Parece algo lógico, puesto que si alguien logra brincar este cerco puede hacer uso inapropiado de todo lo que allí se encuentra. Desde publicar cosas en Facebook, leer mensajes privados o, peor aún, comprar cosas por internet.

Sin embargo, aún existe un porcentaje importante de personas que no realizan esta práctica. En el mercado ya se ofrecen diversos métodos de seguridad en móviles, por lo que no hay excusa para hacer uso de ellos.

En ese sentido, usar un PIN largo es mejor que un patrón, ya que éstos son muy fáciles de memorizar. Un PIN de al menos seis caracteres es lo ideal ya que, según estadísticas, sólo una de cada 10 personas puede memorizarlos al verlos.

  • Compartir demasiada información en Internet

Es importante señalar que cualquier información que compartamos de forma pública, puede ser usada para robar la identidad.

Aunque una fotografía donde se muestra el nombre de la calle de residencia o publicar el nombre de la mascota parecen insignificantes, pueden ser utilizadas para adivinar contraseñas o responder preguntas de seguridad.

Compartirlo todo hoy en día es normal. Pero no está demás tener estas consideraciones.

Hay ocasiones en dónde mostrar información personal es muy importante, pero hay que hacerlo sólo en casos con relevancia suficiente.

Mantener los nombres de conocidos y detalles personales al mínimo también son medidas importantes.

  • Usar un mismo usuario y contraseña en varios lados

Quizá esta es la recomendación más importante. Incluso, cambiar la contraseña de forma regular es altamente aconsejable. Si resulta difícil recordar todas y cada una de ellas, lo mejor será utilizar una aplicación que nos ayude.

Tal vez suene como una trivialidad, pero es como si, por ejemplo, se utilizara la misma llave para abrir la casa, el coche y la cuenta bancaria.

  • No utilizar la autenticación de dos pasos

La filtración de contraseñas está a la orden del día. Ante tal panorama ahora se puede utilizar la autenticación por dos pasos.

Al incluir un paso más de seguridad, implica tener una barrera extra para la protección de las cuentas.

Dicha autenticación consiste en enviar un código aleatorio que se envía mediante mensaje de texto al teléfono móvil del usuario.

Dicha medida ha sido implementada en las plataformas más importantes. Facebook, Twitter, Google, Apple, Instagram, por mencionar algunos, son ejemplos claros de ello.

  • Usar WiFi descuidadamente

A veces, conectarse a un WiFi público es una opción viable. Ya sea porque se agotaron los datos móviles o porque no hay cobertura en algún lugar en específico.

Esa solución tiene sus riesgos. Conectarse a una red WiFi pública es menos seguro porque cualquier persona puede hacerlo también.

Si es realmente necesario utilizar esa fuente, lo mejor es utilizar un VPN para esos casos y cifrar la conexión propia.

Cabe indicar que gastar dinero en un VPN a veces tampoco es viable. Pero se pueden tomar otras medidas de seguridad, como revisar los términos y condiciones para la conexión.

Además, se sugiere sólo visitar los sitios en los que ya se esté registrado, evitar registrarse en nuevas plataformas y no hacer tareas muy importantes.

Revisar que el ícono de HTTPS esté en la barra de navegación también es una recomendación para antes de introducir datos sensibles.

Aunque todas estas son medidas básicas, posiblemente nos ahorrarán pasar malos ratos y tragos amargos.