El estudiante moderno debe poseer diversas cualidades

Todo estudiante que se jacté de ser moderno debe tener presentes las oportunidades que la tecnología brinda para mejorar el aprendizaje. Pero esa sólo es una cualidad de muchas otras que debe poseer.

Retomando el ejemplo anterior, para comprender mejor un tema, ejercitar el pensamiento crítico o resolver problemas, son motivos suficientes para acercase a la tecnología.

En ese sentido, detrás del uso de las Tecnologías de la Información (TIC’s) tiene que haber la capacidad de adaptarlas según las propias necesidades. Dicho de otra manera, tratar de aprender con ellas para sacar todo el provecho posible.

En caso de que su aporte no sea significativo, o sólo genere distracción, hay que ser lo suficientemente capaces para desecharlas.

Otra cualidad inherente de los alumnos modernos es la visión global de las situaciones. Dicho de otra manera, los alumnos modernos deben ser empáticos.

El estudiante moderno, además de tener presentes las oportunidades que la tecnología brinda para mejorar el aprendizaje, debe poseer muchas otra cualidades

Desde el momento en el que se pertenece a un grupo escolar, ya sea presencial o en línea, tratar de entender la situación de los demás es primordial.

Es importante señalar que no todos responden de la misma manera a estímulos o situaciones iguales. Además, las funciones y objetivos individuales siempre son distintos.

En función de la actitud, principalmente, a continuación se enlistan una serie de cualidades que los estudiantes deberían tener, o comenzar a desarrollar.

Todas y cada una de ellas son esenciales, tanto para el desarrollo como la formación del carácter del alumno moderno. Aunque no lo parezca, casi todas se relacionan de alguna manera entre sí.

Su importancia dentro del ámbito escolar es tal que se pueden impregnar en cualquier otro aspecto de la vida cotidiana.

  • Comunicarse efectivamente. Se trata de una forma de comunicación en la que se logra transmitir el mensaje de manera clara y entendible para los interlocutores. No dejar lugar a la confusión, dudas o interpretaciones erróneas. Es efectiva cuando el mensaje enviado llega al receptor de la manera más similar a la idea que se deseó expresar.
  • Colaborar en red. Ya se habló del aprendizaje colaborativo en una ocasión anterior. Se trata de un proyecto o trabajo de aportación intelectual, sobre todo, para alcanzar un objetivo en común. La mayoría de las ocasiones, los objetivos que se alcanzan mediante esta metodología suele ser más rápido de lo habitual.

No todos los individuos responden de la misma manera a estímulos o situaciones iguales

  • Capacidad de adaptación. Se trata de ajustarse al contexto que prevalezca en el momento. Dado que las circunstancias del entorno nunca son las mismas, ni positivas todo el tiempo, es fundamental mantenerse con la calma y la visión necesarias para sortear de manera favorable las circunstancias.
  • Confianza y seguridad. Son conceptos que van de la mano, pueden ser con respecto a otro individuo o con unos mismo. Es la creencia de una persona, o grupo de personas, será capaz de actuar adecuadamente en situaciones particulares. La confianza va más o menos ligada con las acciones que se realizan.
  • Control de uno mismo. Se trata del dominio de los propios impulsos y reacciones, no llegando a ser una técnica de relajación como tal. Es la capacidad consciente de alcanzar un equilibrio personal y de relación. Una persona con suficiente autocontrol es capaz de regular su comportamiento y regular sus emociones.
  • Optimismo. Aunque podría decirse que se trata de esperar lo mejor, en realidad va más allá. Es una postura psicológica en la que existe una predisposición de entender y analizar la realidad desde un punto de vista en el que se confía que el futuro sea favorable, a pesar de las vicisitudes.
  • Iniciativa. Esta cualidad radica en la capacidad de comenzar nuevas tareas, proyectos o actividades por cuenta propia. Incluso la búsqueda de soluciones a problemas está inmersa aquí. Nace de cada persona, es decir, que no hay factores externos que impulsen a alcanzar las metas.
  • Curiosidad. Así se le llama a la intención de descubrir algo que se desconoce. En este aspecto, entran en juego diversos factores psicológicos y emocionales que llevan a la búsqueda de información para saciar el interés. Muchas veces, y gracias a ella, las personas interactúan con otras o con el entorno en general.

Los alumnos modernos deben poseer una visión global de las situaciones

  • Pensamiento crítico. Su fundamento es el de analizar y evaluar razonamientos. Mediante la observación, el razonamiento, la experiencia o el método científico. Dicho tipo de pensamiento requiere de claridad, equidad, precisión y evidencias para evitar confusiones, engaños o el conformismo.

Y tú, ¿te consideras un estudiante moderno?